En concreto el proyecto que elabores tiene que ser:
Económico, real, sustentado, atractivo en lo visual y metodológico, accesible, adaptable, de bajo costo y esfuerzo, transversal.
Requerimientos de estrcutura:
Tipo de letra: arial 11
Sangría de 1.25 ó 1.5
Espaciado: Doble entre párrafo y párrafo y entre títulos y párrafo.
Interlineado: a 1.5
Párrafo: justificado, nunca dejando uno o dos reglones independientes al inicio o final de cuartilla.
Usar entre 3 y 5 párrafos por cuartilla.
Con un tamaño de 12 a 30 cuartillas.
Páginado: inferior derecho.
Contenido:
Hoja de presentación, Índice, Introducción, Objetivos, Justificación, Marco teórico, Marco referencial, Ventajas y desventajas, Recursos (materiales, económicos, humano y tecnológicos), Cronogramas, Descripción de actividades, Resultados, Conclusiones, Referencias y Anexos.
Anexo al documento debes de elaborar material para su presentación:
Dispositiva, una presentación automática (recomendado en Power Point), tomando en cuenta que debe de ser formal, juvenil, motivadora, atractiva, no más de 7 renglones por diapositiva y no más de 7 palabras por renglón.
Un logotipo y slogan del proyecto. Pongan dedicación en su diseño.
Un folleto que presenta la información que expones en tu proyecto y realice comentarios complementarios.
Un tríptico. Que concretice el proyecto y al final vaya un correo para solicitar información.
Souvenir´s, con el logotipo y slogan de tu proyecto. Por ejemplo separadores de lectura.
sábado, 24 de octubre de 2009
sábado, 17 de octubre de 2009
CRONOGRAMA DEL CURSO: POR SEMANAS.
SEMANA 1
Estructura.
Delimitación del proyecto.
Delimitación de los temas a investigar de Marco Teórico y Marco Referencial.
Primer boceto de Introducción.
Nombre equipo
SEMANA 2
Objetivos.
Ventajas y desventajas.
Cronograma del proyecto.
Cronograma de la asignatura.
Introducción. Justificación.
Boceto de Recurso. Humanos, materiales, económicos y tecnológicos.
Inicio de planeación de actividades.
Slogan.
Borrador del logotipo del proyecto.
SEMANA 3
Material didáctico.
Cronograma de la presentación del proyecto para la semana 6.
Hoja de presentación.
Logotipo del proyecto.
Recursos.
Actividades.
Primer recopilación de información de la primer aplicación de actividades
SEMANA 4
Porcesamiento de datos de la aplicación de las actividades.
Anexos y Evidencias.
Conclusiones.
SEMANA 5
Material de la presentación.
Organización de la presentación.
Logotipo de la presentación (Grupal).
material para la presentación.
elaboración de presentación del proyecto en una presentación automatizada (recomendado, power point)
SEMANA DE PRESENTACIÓN:
Evaluación de los alumnos en equipos.
Evaluación del profesor por parte de los alumnos.
Presentación del proyecto al expterior.
Estructura.
Delimitación del proyecto.
Delimitación de los temas a investigar de Marco Teórico y Marco Referencial.
Primer boceto de Introducción.
Nombre equipo
SEMANA 2
Objetivos.
Ventajas y desventajas.
Cronograma del proyecto.
Cronograma de la asignatura.
Introducción. Justificación.
Boceto de Recurso. Humanos, materiales, económicos y tecnológicos.
Inicio de planeación de actividades.
Slogan.
Borrador del logotipo del proyecto.
SEMANA 3
Material didáctico.
Cronograma de la presentación del proyecto para la semana 6.
Hoja de presentación.
Logotipo del proyecto.
Recursos.
Actividades.
Primer recopilación de información de la primer aplicación de actividades
SEMANA 4
Porcesamiento de datos de la aplicación de las actividades.
Anexos y Evidencias.
Conclusiones.
SEMANA 5
Material de la presentación.
Organización de la presentación.
Logotipo de la presentación (Grupal).
material para la presentación.
elaboración de presentación del proyecto en una presentación automatizada (recomendado, power point)
SEMANA DE PRESENTACIÓN:
Evaluación de los alumnos en equipos.
Evaluación del profesor por parte de los alumnos.
Presentación del proyecto al expterior.
¿QUÉ ES Y QUÉ NO ES UN PROYECTO ESCOLAR?
Es conveniente que los proyectos escolares que se elaboren, consideren las siguientes características:
• Deben ser producto de la participación de todos los maestros de la escuela.
• Tener como eje articulado la atención de los problemas de aprovechamiento de los alumnos.
• Establecer los propósitos a largo plazo que la escuela pretende lograr con la relación del proyecto y definir con claridad los resultados que se espera obtener a mediado y corto plazo, es decir, en ciclo escolar y cada grado.
• Definir actividades y formas de trabajo que permitan la coordinación de esfuerzos para conseguir los propósitos en tres ámbitos: el aula, la escuela y la relación con las familias.
• Definir el papel que tendrá cada uno de los miembros de la escuela.
• Establecer los mecanismos de evaluación del proyecto escolar.
Cada proyecto escolar es único. En tanto responde a necesidades y problemáticas específicas, es muy difícil que un proyecto sea útil para varias escuelas conservando exactamente el mismo contenido. De la misma manera, no es conveniente establecer un modelo; si bien hay elementos indispensables que todo proyecto debe de tener, cada escuela debe definir la mejor manera de estructurar su proyecto.
El carácter único de cada proyecto escolar no está en el tema que aborda, puesto que los equipos docentes de diferentes escuelas pueden ponerse como objetivo, por ejemplo, el mejoramiento de determinadas habilidades de sus alumnos; aun cuando el tema sea el mismo, las estrategias planteadas para su solución serán diferentes, en tanto se diseñan para atender las necesidades y características especificas de cada plantel. Los factores que inciden en el o los principales problemas educativos seleccionados en cada escuela son diferentes y los recursos con los que se cuenta para sus soluciones (humanos, materiales y funcionales, como el tiempo) también lo son.
En resumen, a continuación, se presenta una lista de lo que es y lo que no es un proyecto escolar:
Lo que ES un proyecto escolar
• Un camino concreto para lograr un fin común: el mejoramiento de la calidad de los aprendizajes de todos los alumnos de una institución.
• Un instrumento que tiene por objetivo solucionar el o los principales problemas educativos de los alumnos de una institución.
• Una propuesta de trabajo elaborada en las academias y valorada en Consejo Técnico, con la participación de todos los docentes, coordinados por el director o por una comisión de maestros.
• Un conjunto de objetivos concretos y realistas, en los que se consideran las posibilidades y limitaciones que ofrecen los recursos con los que cuentan las instituciones (humanos, materiales y funcionales, como el tiempo) también lo son.
• Un plan con estrategias y actividades, articuladas secuencias (que especifican cuáles deben realizarse en el aula, la escuela y por las familias) y que establece compromisos específicos de cada uno de los miembros de la escuela.
• Un programa de trabajo con objetivos precisos, que puede acabar mas de un ciclo escolar pero establece metas claras para cada uno y las actividades necesarias para lograrlas.
• Una propuesta que establece con precisión contenidos prioritarios y estilos de trabajo para cada grado.
• Una propuesta para la organización escolar que se adapta a las características particulares de los alumnos y sus docentes.
• Un plan de trabajo que contempla los mecanismos para evaluar, corregir y enriquecer el proceso y que es, en este sentido, susceptible de ir adecuándose en función de los logros y obstáculos que se presenten.
• Un programa de actividades que no establece fechas para su realización ni objetivos ni metas.
Lo que NO ES un proyecto escolar
• Un plan de acción para resolver problemas generados por situaciones externas a la escuela, por ejemplo, el problema de la desnutrición en los alumnos, para lo cual se requeriría la intervención de varias instancias.
• La suma de los objetivos que cada maestro, aisladamente, se propone lograr con su grupo escolar.
• Un documento administrativo más, elaborado por una sola persona, o el plan anual de trabajo, que señala las tareas que de cualquier manera.
CARACTERÍSTICAS.
• Una lista de buenas intenciones o de objetivos comunes poco realistas, cuya puesta en práctica requeriría condiciones imposibles de lograr y la disponibilidad de recursos extraordinarios.
• Una lista de actividades sin relación entre sí, en donde no se aclara quién o quiénes deben realizarlas.
• Una propuesta de trabajo en la que el establecimiento de prioridades significa la supresión de otros propósitos de la escuela primaria.
• Un conjunto de estrategias de enseñanza iguales para todos los grupos y grados.
• Un plan de trabajo rígido y sin mecanismos de seguimiento y evaluación.
• Deben ser producto de la participación de todos los maestros de la escuela.
• Tener como eje articulado la atención de los problemas de aprovechamiento de los alumnos.
• Establecer los propósitos a largo plazo que la escuela pretende lograr con la relación del proyecto y definir con claridad los resultados que se espera obtener a mediado y corto plazo, es decir, en ciclo escolar y cada grado.
• Definir actividades y formas de trabajo que permitan la coordinación de esfuerzos para conseguir los propósitos en tres ámbitos: el aula, la escuela y la relación con las familias.
• Definir el papel que tendrá cada uno de los miembros de la escuela.
• Establecer los mecanismos de evaluación del proyecto escolar.
Cada proyecto escolar es único. En tanto responde a necesidades y problemáticas específicas, es muy difícil que un proyecto sea útil para varias escuelas conservando exactamente el mismo contenido. De la misma manera, no es conveniente establecer un modelo; si bien hay elementos indispensables que todo proyecto debe de tener, cada escuela debe definir la mejor manera de estructurar su proyecto.
El carácter único de cada proyecto escolar no está en el tema que aborda, puesto que los equipos docentes de diferentes escuelas pueden ponerse como objetivo, por ejemplo, el mejoramiento de determinadas habilidades de sus alumnos; aun cuando el tema sea el mismo, las estrategias planteadas para su solución serán diferentes, en tanto se diseñan para atender las necesidades y características especificas de cada plantel. Los factores que inciden en el o los principales problemas educativos seleccionados en cada escuela son diferentes y los recursos con los que se cuenta para sus soluciones (humanos, materiales y funcionales, como el tiempo) también lo son.
En resumen, a continuación, se presenta una lista de lo que es y lo que no es un proyecto escolar:
Lo que ES un proyecto escolar
• Un camino concreto para lograr un fin común: el mejoramiento de la calidad de los aprendizajes de todos los alumnos de una institución.
• Un instrumento que tiene por objetivo solucionar el o los principales problemas educativos de los alumnos de una institución.
• Una propuesta de trabajo elaborada en las academias y valorada en Consejo Técnico, con la participación de todos los docentes, coordinados por el director o por una comisión de maestros.
• Un conjunto de objetivos concretos y realistas, en los que se consideran las posibilidades y limitaciones que ofrecen los recursos con los que cuentan las instituciones (humanos, materiales y funcionales, como el tiempo) también lo son.
• Un plan con estrategias y actividades, articuladas secuencias (que especifican cuáles deben realizarse en el aula, la escuela y por las familias) y que establece compromisos específicos de cada uno de los miembros de la escuela.
• Un programa de trabajo con objetivos precisos, que puede acabar mas de un ciclo escolar pero establece metas claras para cada uno y las actividades necesarias para lograrlas.
• Una propuesta que establece con precisión contenidos prioritarios y estilos de trabajo para cada grado.
• Una propuesta para la organización escolar que se adapta a las características particulares de los alumnos y sus docentes.
• Un plan de trabajo que contempla los mecanismos para evaluar, corregir y enriquecer el proceso y que es, en este sentido, susceptible de ir adecuándose en función de los logros y obstáculos que se presenten.
• Un programa de actividades que no establece fechas para su realización ni objetivos ni metas.
Lo que NO ES un proyecto escolar
• Un plan de acción para resolver problemas generados por situaciones externas a la escuela, por ejemplo, el problema de la desnutrición en los alumnos, para lo cual se requeriría la intervención de varias instancias.
• La suma de los objetivos que cada maestro, aisladamente, se propone lograr con su grupo escolar.
• Un documento administrativo más, elaborado por una sola persona, o el plan anual de trabajo, que señala las tareas que de cualquier manera.
CARACTERÍSTICAS.
• Una lista de buenas intenciones o de objetivos comunes poco realistas, cuya puesta en práctica requeriría condiciones imposibles de lograr y la disponibilidad de recursos extraordinarios.
• Una lista de actividades sin relación entre sí, en donde no se aclara quién o quiénes deben realizarlas.
• Una propuesta de trabajo en la que el establecimiento de prioridades significa la supresión de otros propósitos de la escuela primaria.
• Un conjunto de estrategias de enseñanza iguales para todos los grupos y grados.
• Un plan de trabajo rígido y sin mecanismos de seguimiento y evaluación.
¿QUÉ ES UN PROYECTO ESCOLAR?
¿QUÉ ES EL PROYECTO ESCOLAR?
Por:
LIC. Miguel Rivera López
Un proyecto escolar es un instrumento para la organización del trabajo en la escuela, en el que se establecen objetivos y se proponen estrategias y actividades para la solución del o los principales problemas relacionados con los resultados educativos que obtienen los alumnos. Constituye una propuesta elaborada por el conjunto de profesores con la coordinación del director o de una comisión de maestros.
El proyecto escolar tiene como propósito general orientar el trabajo de todos los profesores para mejorar la calidad del aprendizaje de los alumnos. Representa la posibilidad de que cada escuela defina el camino para alcanzar ese objetivo, tomando en cuenta que las poblaciones atendidas, la estructura de las escuelas, la experiencia de los maestros y el contexto socioeconómico y cultural son diversos. Es en este sentido que el proyecto escolar relaciona los objetivos plasmados en el plan y los programas de estudio con la situación específica de cada escuela.
En términos prácticos, un proyecto escolar ensayar respuestas o soluciones para el o los principales problemas de aprendizaje, detectados mediante un análisis de la situación de la escuela. Para realizar este análisis, la escuela debe disponer de datos precisos sobre las distintas causas o factores que influyen en el problema.
Por:
LIC. Miguel Rivera López
Un proyecto escolar es un instrumento para la organización del trabajo en la escuela, en el que se establecen objetivos y se proponen estrategias y actividades para la solución del o los principales problemas relacionados con los resultados educativos que obtienen los alumnos. Constituye una propuesta elaborada por el conjunto de profesores con la coordinación del director o de una comisión de maestros.
El proyecto escolar tiene como propósito general orientar el trabajo de todos los profesores para mejorar la calidad del aprendizaje de los alumnos. Representa la posibilidad de que cada escuela defina el camino para alcanzar ese objetivo, tomando en cuenta que las poblaciones atendidas, la estructura de las escuelas, la experiencia de los maestros y el contexto socioeconómico y cultural son diversos. Es en este sentido que el proyecto escolar relaciona los objetivos plasmados en el plan y los programas de estudio con la situación específica de cada escuela.
En términos prácticos, un proyecto escolar ensayar respuestas o soluciones para el o los principales problemas de aprendizaje, detectados mediante un análisis de la situación de la escuela. Para realizar este análisis, la escuela debe disponer de datos precisos sobre las distintas causas o factores que influyen en el problema.
ALCANCES Y LÍMITES DE UN PROYECTO ESCOLAR
Alcances y límites del proyecto escolar
Aun cuando en una escuela se reconozca la multiplicidad de factores que influyen en los resultados educativos de los alumnos, es necesario que se delimite claramente en qué ámbitos la acción coordinada de los maestros efectivamente puede incidir. Es evidente que los problemas derivados del nivel socioeconómico, tales como la desnutrición o el desempleo de los padres, escapan del ámbito de intervención de los maestros.
Tampoco puede esperase que mediante el proyecto elaborado por la escuela se resuelvan carencias materiales o de infraestructura del plantel escolar, como construir mas aulas, una barda o una cancha deportiva, o aumentar el numero de maestros. Aun cuando este tipo de problemas son apremiantes en algunos casos, es necesario reconocer que para su solución no es suficiente el trabajo coordinado y permanente de los maestros o la participación de los padres de familia, sino que es responsabilidad de las autoridades educativas, en sus diferentes niveles. Estos no son, entonces, el tipo de problemas sobre los que debe articularse un proyecto escolar.
El campo de acción de un proyecto escolar lo constituyen aquellos problemas que pueden ser solucionados mediante la acción coordinada de todos los maestros de una escuela: los que tienen que ver con la enseñanza y las formas de organización interna. Aun dentro de estos ámbitos, no puede esperarse que mediante el desarrollo del proyecto se solucionen inmediatamente todos los problemas detectados; establecer un alcance gradual de los objetivos permite que los resultados educativos sean cada vez mejores.
Cuando una escuela trata de encontrar las causas por las cuales de sus alumnos obtienen escasos logros, es muy probable que se concluya con una larga lista de problemas. En términos generales, un proyecto escolar debería graduar objetivos para la atención de los problemas identificados; sin embargo, ya que puede tratarse de diferente naturaleza que impliquen distintos tipos de soluciones o estrategias, es más conveniente que en principio se plantee un proyecto escolar centrado en uno de los problemas identificados.
Es mejor plantear un proyecto escolar sencillo y claro –cuyo desarrollo permita apreciar tendencias de mejoramiento en el aprendizaje de los alumnos en plazo más o menos corto-, siempre y cuando esto no se traduzca en un objetivo que fragmente o este desvinculado de los propósitos educativos de la primaria. Por ejemplo, es posible plantearse “mejorar la comprensión de lectura de los alumnos y su capacidad para escribir textos”, ya que es un objetivo claro, factible mediante la aplicación de estrategias adecuadas, y consecuente, no sólo con el enfoque para la enseñanza de la lengua, sino necesario para el trabajo con todas las asignaturas. Si se proponen “mejorar la letra y la ortografía de los alumnos”, el objetivo es sencillo y claro, pero el problema se reduce en aspectos gráficos y convencionales de la lectura y escritura, y no se atiende el carácter comunicativo-funcional que se destaca en el plan y los programas de estudio.
En la medida en que la consolidación del trabajo colegiado y la habilidad para detectar las causas de los problemas sea mayor, y mejore el diseño y desarrollo de estrategias para alcanzar soluciones, se podrán plantear objetivos más complejos, que contemplen la atención de un mayor número de problemas.
Lo anterior no implica que en un proyecto escolar, de inicio, no pueda plantearse la atención de más de un problema; esto dependerá, básicamente, de las características y condiciones del equipo docente: las escuelas donde se tenga experiencia de trabajo en conjunto tendrán mejores condiciones y, por lo tanto, mayores probabilidades de éxito para desarrollar un proyecto escolar más complejo.
No se busca que las actividades de la escuela se concentren sólo en el o los problemas que sean definidos como fundamentales y se descuiden otras; si esto fuera así, a la larga podrían lograrse mejores resultados en una de las áreas de estudio, pero se enfrentarían a mayores deficiencias en los resultados educativos generales de los alumnos.
Tampoco se busca que el proyecto escolar sea un programa más, al margen de otras actividades. Lo que se pretende es buscar la solución del o los problemas seleccionados mediante un enfoque compartido que articule actividades de enseñanza, de funcionamiento de la escuela y de mejoramiento de otras tareas cotidianas.
Uno de los mayores logros del proyecto es la construcción de formas de trabajo y estrategias compartidas, que si bien incluyen las actividades que, de cualquier manera, realiza cada profesor con su grupo, éstas han sido repensadas, articuladas y enriquecidas en función de la meta común. De esta manera se logra que el aprendizaje de los alumnos encuentre continuidad al pasar de un grado a otro o de un profesor a otro. Debe recordarse que los propósitos básicos en la educación primaria se construyen a largo de la trayectoria de los niños en la escuela.
En resumen, mediante el desarrollo de un proyecto escolar se pretende:
• Resolver el o los problemas que enfrenta la escuela para mejorar los resultados educativos de sus alumnos.
• Articular, en torno a una finalidad común, las principales tareas cotidianas de todos los maestros de una escuela.
• Aprovechar al máximo los recursos con los que cuenta la escuela (entre ellos el tiempo y las capacidades individuales de todos sus integrantes).
• Propiciar la formación en el trabajo de los profesores y directivos, al exigir la búsqueda de soluciones para los problemas detectados.
• Incorporar la autoevaluación como práctica sistemática de la escuela en su conjunto
Aun cuando en una escuela se reconozca la multiplicidad de factores que influyen en los resultados educativos de los alumnos, es necesario que se delimite claramente en qué ámbitos la acción coordinada de los maestros efectivamente puede incidir. Es evidente que los problemas derivados del nivel socioeconómico, tales como la desnutrición o el desempleo de los padres, escapan del ámbito de intervención de los maestros.
Tampoco puede esperase que mediante el proyecto elaborado por la escuela se resuelvan carencias materiales o de infraestructura del plantel escolar, como construir mas aulas, una barda o una cancha deportiva, o aumentar el numero de maestros. Aun cuando este tipo de problemas son apremiantes en algunos casos, es necesario reconocer que para su solución no es suficiente el trabajo coordinado y permanente de los maestros o la participación de los padres de familia, sino que es responsabilidad de las autoridades educativas, en sus diferentes niveles. Estos no son, entonces, el tipo de problemas sobre los que debe articularse un proyecto escolar.
El campo de acción de un proyecto escolar lo constituyen aquellos problemas que pueden ser solucionados mediante la acción coordinada de todos los maestros de una escuela: los que tienen que ver con la enseñanza y las formas de organización interna. Aun dentro de estos ámbitos, no puede esperarse que mediante el desarrollo del proyecto se solucionen inmediatamente todos los problemas detectados; establecer un alcance gradual de los objetivos permite que los resultados educativos sean cada vez mejores.
Cuando una escuela trata de encontrar las causas por las cuales de sus alumnos obtienen escasos logros, es muy probable que se concluya con una larga lista de problemas. En términos generales, un proyecto escolar debería graduar objetivos para la atención de los problemas identificados; sin embargo, ya que puede tratarse de diferente naturaleza que impliquen distintos tipos de soluciones o estrategias, es más conveniente que en principio se plantee un proyecto escolar centrado en uno de los problemas identificados.
Es mejor plantear un proyecto escolar sencillo y claro –cuyo desarrollo permita apreciar tendencias de mejoramiento en el aprendizaje de los alumnos en plazo más o menos corto-, siempre y cuando esto no se traduzca en un objetivo que fragmente o este desvinculado de los propósitos educativos de la primaria. Por ejemplo, es posible plantearse “mejorar la comprensión de lectura de los alumnos y su capacidad para escribir textos”, ya que es un objetivo claro, factible mediante la aplicación de estrategias adecuadas, y consecuente, no sólo con el enfoque para la enseñanza de la lengua, sino necesario para el trabajo con todas las asignaturas. Si se proponen “mejorar la letra y la ortografía de los alumnos”, el objetivo es sencillo y claro, pero el problema se reduce en aspectos gráficos y convencionales de la lectura y escritura, y no se atiende el carácter comunicativo-funcional que se destaca en el plan y los programas de estudio.
En la medida en que la consolidación del trabajo colegiado y la habilidad para detectar las causas de los problemas sea mayor, y mejore el diseño y desarrollo de estrategias para alcanzar soluciones, se podrán plantear objetivos más complejos, que contemplen la atención de un mayor número de problemas.
Lo anterior no implica que en un proyecto escolar, de inicio, no pueda plantearse la atención de más de un problema; esto dependerá, básicamente, de las características y condiciones del equipo docente: las escuelas donde se tenga experiencia de trabajo en conjunto tendrán mejores condiciones y, por lo tanto, mayores probabilidades de éxito para desarrollar un proyecto escolar más complejo.
No se busca que las actividades de la escuela se concentren sólo en el o los problemas que sean definidos como fundamentales y se descuiden otras; si esto fuera así, a la larga podrían lograrse mejores resultados en una de las áreas de estudio, pero se enfrentarían a mayores deficiencias en los resultados educativos generales de los alumnos.
Tampoco se busca que el proyecto escolar sea un programa más, al margen de otras actividades. Lo que se pretende es buscar la solución del o los problemas seleccionados mediante un enfoque compartido que articule actividades de enseñanza, de funcionamiento de la escuela y de mejoramiento de otras tareas cotidianas.
Uno de los mayores logros del proyecto es la construcción de formas de trabajo y estrategias compartidas, que si bien incluyen las actividades que, de cualquier manera, realiza cada profesor con su grupo, éstas han sido repensadas, articuladas y enriquecidas en función de la meta común. De esta manera se logra que el aprendizaje de los alumnos encuentre continuidad al pasar de un grado a otro o de un profesor a otro. Debe recordarse que los propósitos básicos en la educación primaria se construyen a largo de la trayectoria de los niños en la escuela.
En resumen, mediante el desarrollo de un proyecto escolar se pretende:
• Resolver el o los problemas que enfrenta la escuela para mejorar los resultados educativos de sus alumnos.
• Articular, en torno a una finalidad común, las principales tareas cotidianas de todos los maestros de una escuela.
• Aprovechar al máximo los recursos con los que cuenta la escuela (entre ellos el tiempo y las capacidades individuales de todos sus integrantes).
• Propiciar la formación en el trabajo de los profesores y directivos, al exigir la búsqueda de soluciones para los problemas detectados.
• Incorporar la autoevaluación como práctica sistemática de la escuela en su conjunto
¿CÓMO INICIO UN PROYECTO ESCOLAR?
PUNTOS DE PARTIDA PARA LA ELABORACIÓN DEL PROYECTO ESCOLAR
Por:
Lic. Miguel Rivera López
Si bien es conocido que en cada escuela existen condiciones particulares que pueden favorecer u obstaculizar el diseño y puesta en práctica del proyecto escolar, hay ciertas condiciones mínimas para lograr que esta propuesta sea exitosa. Las más importantes se mencionan enseguida.
Un proyecto escolar, como se ha dicho antes, es un medio para solucionar el o los principales problemas que una escuela enfrenta para lograr los propósitos educativos; por esta razón, es importante que todos los docentes de una institución conozcan el conjunto del plan y no sólo los programas del grado que atienden, analicen los propósitos básicos de toda la currícula e identifiquen lo que el trabajo en cada grado puede aportar.
Para ello, un requisito fundamental para establecer los objetivos, estrategias y actividades del proyecto escolar, es el estudio colectivo y orientado del plan y programas de estudio, así como de los materiales de apoyo a la labor docente y los materiales para los alumnos. Este primer paso en la elaboración del proyecto puede realizarse en trabajo por grado y en conjunto, pues el conocimiento de la secuencia de los contenidos permitirá acordar estrategias generales de enseñanza que den continuidad al aprendizaje. Sólo con esta base es posible plantear estrategias específicas para el trabajo con los distintos grados.
La claridad sobre los problemas que la escuela enfrenta es otra de las condiciones mínimas para el éxito de un proyecto escolar. De ahí la necesidad de determinar de manera confiable el punto de partida de la escuela –en cuanto al grupo docente y alumnos-, para establecer las estrategias que permitan lograr el nivel deseado en los resultados educativos.
Como se ha mencionado anteriormente, el proyecto escolar es la expresión del compromiso conjunto del grupo de maestros. Por ello debe ser elaborado y desarrollado por todos los maestros de una escuela bajo la coordinación del director o de una comisión del personal docente. El hecho de que el o los coordinadores organicen la discusión y guíen al grupo para la toma de acuerdos. De ninguna manera significa que asuman la elaboración y ejecución del proyecto escolar ellos solos.
El trabajo conjunto no se traduce en que todos realicen cada una de las actividades planeadas, la participación significa tomar decisiones colectivas que orienten las acciones individuales. Estas decisiones colectivas involucran a cada maestro de manera diferente, en función del papel específico que se desempeñe, de su interés y del grado que atiende, es decir, de su ámbito de competencia.
La participación de las familias debe definirse según el tipo de relación que cada escuela ha establecido con ellos, en algunos casos será posible que colaboren activamente desde el principio y en otros será necesario realizar un trabajo de convencimiento. Como quiera que sea, deberán de estar informados oportunamente de la realización del proyecto y de los logros que se obtengan.
Conviene tener siempre presente que la participación en el proyecto escolar no puede forzarse, aunque las actividades que se realicen sí deben mostrar que todos pueden aprender cosas de todos, para que poco a poco se venzan las resistencias y se construya una nueva forma de relación entre los miembros de cada escuela.
En este contexto, el Consejo Técnico y las academias tienen un papel muy importante en la elaboración y desarrollo del proyecto escolar, puesto que en ese espacio donde se comparte información, se distribuyen tareas –es decir, se decide en qué momento y en qué formas participa cada miembro de la escuela-, se establecen compromisos y calendarios y se evalúan las actividades realizadas. De esta manera, el Consejo Técnico y la academia se convierte en un órgano de reflexión y de toma de decisiones sobre aspectos pedagógicos.
Por supuesto, no se propone que el Consejo Técnico y las academias se concentren sólo en la atención de las actividades relacionadas con el proyecto escolar. Sin embargo, en la medida en que este instrumento logre articular, efectivamente, las tareas pedagógicas de la escuela, el Consejo Técnico y la academia se convertirá en el espacio para comentar el trabajo en equipo.
Por:
Lic. Miguel Rivera López
Si bien es conocido que en cada escuela existen condiciones particulares que pueden favorecer u obstaculizar el diseño y puesta en práctica del proyecto escolar, hay ciertas condiciones mínimas para lograr que esta propuesta sea exitosa. Las más importantes se mencionan enseguida.
Un proyecto escolar, como se ha dicho antes, es un medio para solucionar el o los principales problemas que una escuela enfrenta para lograr los propósitos educativos; por esta razón, es importante que todos los docentes de una institución conozcan el conjunto del plan y no sólo los programas del grado que atienden, analicen los propósitos básicos de toda la currícula e identifiquen lo que el trabajo en cada grado puede aportar.
Para ello, un requisito fundamental para establecer los objetivos, estrategias y actividades del proyecto escolar, es el estudio colectivo y orientado del plan y programas de estudio, así como de los materiales de apoyo a la labor docente y los materiales para los alumnos. Este primer paso en la elaboración del proyecto puede realizarse en trabajo por grado y en conjunto, pues el conocimiento de la secuencia de los contenidos permitirá acordar estrategias generales de enseñanza que den continuidad al aprendizaje. Sólo con esta base es posible plantear estrategias específicas para el trabajo con los distintos grados.
La claridad sobre los problemas que la escuela enfrenta es otra de las condiciones mínimas para el éxito de un proyecto escolar. De ahí la necesidad de determinar de manera confiable el punto de partida de la escuela –en cuanto al grupo docente y alumnos-, para establecer las estrategias que permitan lograr el nivel deseado en los resultados educativos.
Como se ha mencionado anteriormente, el proyecto escolar es la expresión del compromiso conjunto del grupo de maestros. Por ello debe ser elaborado y desarrollado por todos los maestros de una escuela bajo la coordinación del director o de una comisión del personal docente. El hecho de que el o los coordinadores organicen la discusión y guíen al grupo para la toma de acuerdos. De ninguna manera significa que asuman la elaboración y ejecución del proyecto escolar ellos solos.
El trabajo conjunto no se traduce en que todos realicen cada una de las actividades planeadas, la participación significa tomar decisiones colectivas que orienten las acciones individuales. Estas decisiones colectivas involucran a cada maestro de manera diferente, en función del papel específico que se desempeñe, de su interés y del grado que atiende, es decir, de su ámbito de competencia.
La participación de las familias debe definirse según el tipo de relación que cada escuela ha establecido con ellos, en algunos casos será posible que colaboren activamente desde el principio y en otros será necesario realizar un trabajo de convencimiento. Como quiera que sea, deberán de estar informados oportunamente de la realización del proyecto y de los logros que se obtengan.
Conviene tener siempre presente que la participación en el proyecto escolar no puede forzarse, aunque las actividades que se realicen sí deben mostrar que todos pueden aprender cosas de todos, para que poco a poco se venzan las resistencias y se construya una nueva forma de relación entre los miembros de cada escuela.
En este contexto, el Consejo Técnico y las academias tienen un papel muy importante en la elaboración y desarrollo del proyecto escolar, puesto que en ese espacio donde se comparte información, se distribuyen tareas –es decir, se decide en qué momento y en qué formas participa cada miembro de la escuela-, se establecen compromisos y calendarios y se evalúan las actividades realizadas. De esta manera, el Consejo Técnico y la academia se convierte en un órgano de reflexión y de toma de decisiones sobre aspectos pedagógicos.
Por supuesto, no se propone que el Consejo Técnico y las academias se concentren sólo en la atención de las actividades relacionadas con el proyecto escolar. Sin embargo, en la medida en que este instrumento logre articular, efectivamente, las tareas pedagógicas de la escuela, el Consejo Técnico y la academia se convertirá en el espacio para comentar el trabajo en equipo.
¿POR QUÉ PROYECTOS ESCOLARES?
¿Por qué trabajar con-en proyecto?
Por Miguel Rivera López.
El arquitecto que tiene que construir una obra no comienza colocando los ladrillos uno sobre otro, adquiriendo las puertas y ventanas para el mismo. Lo primero que hace es elaborar un PROYECTO que organice el conjunto de posibilidades, ideas, creatividades que lo inspiran, las necesidades de las personas que utilizarán ese edificio, las limitaciones y particularidades de ese terreno, la orientación del sol, el acceso a los medios de transporte, etc.
En cualquier circunstancia y para poder operar se requiere primero conocer la situación, reconstruir la génesis de sus problemas y descubrir lo desafíos que deberán ser enfrentados.
Que la escuela es una realidad compleja, nadie lo niega. Lo es haber intentado conducirlas como si fueran sistemas muy simples. Además en las concepciones tradicionales sobre la conducción y organización escolar ha faltado otorgar al directivo liderazgo y capacidad para la gestión global de la institución.
Cada unidad educativa se encuentra en “situación”, siempre se encuentra enclavada en una trama social, en un encuentro de circunstancias y personas particulares. Para la unidad educativa, entra en PROYECTO puede ser la oportunidad de articular la vida de la escuela, los acontecimientos de cada día, las situaciones problemáticas, las urgencias, la participación de los distintos actores, en un TODO coherente.
Puede ser la posibilidad de reinventar la manera de hacer la escuela, de organizarla, de posibilitar la participación. Y, también, de promover la puesta en práctica de una o varias alternativas de la tarea a afrontar.
En un sentido simple, entrar en proyecto es identificar problemas específicos de esa situación, darles una organización interpretativa y construir acciones que intenten resolverlos.
Por Miguel Rivera López.
El arquitecto que tiene que construir una obra no comienza colocando los ladrillos uno sobre otro, adquiriendo las puertas y ventanas para el mismo. Lo primero que hace es elaborar un PROYECTO que organice el conjunto de posibilidades, ideas, creatividades que lo inspiran, las necesidades de las personas que utilizarán ese edificio, las limitaciones y particularidades de ese terreno, la orientación del sol, el acceso a los medios de transporte, etc.
En cualquier circunstancia y para poder operar se requiere primero conocer la situación, reconstruir la génesis de sus problemas y descubrir lo desafíos que deberán ser enfrentados.
Que la escuela es una realidad compleja, nadie lo niega. Lo es haber intentado conducirlas como si fueran sistemas muy simples. Además en las concepciones tradicionales sobre la conducción y organización escolar ha faltado otorgar al directivo liderazgo y capacidad para la gestión global de la institución.
Cada unidad educativa se encuentra en “situación”, siempre se encuentra enclavada en una trama social, en un encuentro de circunstancias y personas particulares. Para la unidad educativa, entra en PROYECTO puede ser la oportunidad de articular la vida de la escuela, los acontecimientos de cada día, las situaciones problemáticas, las urgencias, la participación de los distintos actores, en un TODO coherente.
Puede ser la posibilidad de reinventar la manera de hacer la escuela, de organizarla, de posibilitar la participación. Y, también, de promover la puesta en práctica de una o varias alternativas de la tarea a afrontar.
En un sentido simple, entrar en proyecto es identificar problemas específicos de esa situación, darles una organización interpretativa y construir acciones que intenten resolverlos.
¿CÓMO SE ELABORA UN PROYECTO ESCOLAR?
¿CÓMO SE ELABORA UN PROYECTO ESCOLAR?
Por:
Lic. Miguel Rivera López
La base para la elaboración de un proyecto escolar es la identificación de los principales problemas que enfrenta la escuela para mejorar la calidad de los aprendizajes de sus alumnos, así como la valoración de los recursos con los que cuenta. Para ello, es conveniente realizar actividades que permitan obtener información precisa sobre los resultados educativos, por ejemplo: número de alumnos que concluyen sus estudios en el nivel correspondiente, índice de reprobación por grado, habilidades y competencias desarrolladas, etc. Además, es necesario prever las condiciones reales que el plantel tiene en cuanto a recursos humanos, materiales y tiempo.
Una vez que se cuenta con una visión precisa de los problemas, es conveniente analizar los datos obtenidos, con el fin de determinar qué problemas son, por su gravedad, los que deben atenderse primero.
La elaboración de un nuevo proyecto escolar se inicia con la definición de sus objetivos, que deben ser coherentes con el o los problemas elegidos por el equipo decente. Su planteamiento orienta las actividades y define hasta donde se quiere llegar en la solución del problema; es decir, aluden los resultados que se esperan alcanzar y, en consecuencia, da pautas sobre la forma de lograrlos. Un proyecto escolar puede plantear uno o varios objetivos.
Los objetivos deben ser definidos por todos los maestros de a escuela, con la intención de que realmente expresen lo que se pretende lograr como grupo; su planteamiento debe tener un sentido de utilidad tanto para los directivos, como para todos los docentes y alumnos, es decir, para todos los grados y grupos; no es posible plantear objetivos que solo atañan a los maestros o a los alumnos de “X” grado.
En tanto se definen co el propósito de orientar la búsqueda de soluciones para uno o más de los problemas relacionados con los resultados educativos de los alumnos, deben estar directamente vinculados con los propósitos establecidos en el plan y los programas de estudio de “X” currícula.
Los objetivos deben ser claros, precisos y realizables en un corto o mediano plazo; además deben ser congruentes entre sí, es decir, no cabe plantear propósitos contradictorios. Pretender objetivos demasiado ambiciosos, sobre todo al iniciar este tipo de trabajo, puede provocar frustración en el equipo docente si no se logra todo lo que se pretende. Por ejemplo, si se propone un objetivo como el siguiente:
“Que en el curso del año escolar el educando reciba los conocimientos y habilidades para aprender de manera autónoma a descubrir y asumir valores, analizar y resolver problemas, vivir en sociedad, aportar lo necesario para mejorar sus condiciones de vida y contribuir eficazmente al desarrollo de su comunidad”
Es probable que este objetivo no pueda realizarse en un ciclo escolar, ya que condensa buena parte de los propósitos educativos de toda una vida escolar –aunque es indispensable considerar estos propósitos educativos como marco, no se trata de reproducirlos en los objetivos de un proyecto escolar-. Por otra parte, este objetivo hace referencia a varias áreas del aprendizaje; evidentemente, no se deriva del análisis sobre los resultados educativos de los alumnos.
El extremo contrario es plantear objetivos que reduzcan los propósitos de la primaria a aspectos mínimos del aprendizaje o incluso que no los consideran. Por ejemplo:
“Que haya disciplina en la portación del uniforme escolar”
“Mejorar la ortografía de los alumnos de primer semestre”
Si bien estos tienen que ver en la formación de valores cívicos y con la habilidad para escribir, toca sólo aspectos mínimos de las asignaturas; para lograrlos no es necesario elaborar y desarrollar un proyecto escolar.
En cambio, cuando efectivamente se toma en cuenta la problemática específica de cada plantel, puede lograrse mayor precisión. Por ejemplo:
Proponer técnicas de trabajo en el aula que faciliten en los alumnos el desarrollo de:
a) La capacidad de expresar por escrito y oralmente ideas, pensamientos, conocimientos científicos, propuestas, preguntas, críticas, argumentos, sentimientos, etc.
b) El gusto por la lectura y la literatura.
c) La habilidad para realizar investigaciones sobre diversos temas y presentar los resultados públicamente.
Aunque parezca que este objetivo es demasiado sencillo, en realidad se refiere a los propósitos fundamentales de la educación y las estrategias y actividades necesarias para lograr lo exige le trabajo conjunto de todos los miembros de una institución
Por:
Lic. Miguel Rivera López
La base para la elaboración de un proyecto escolar es la identificación de los principales problemas que enfrenta la escuela para mejorar la calidad de los aprendizajes de sus alumnos, así como la valoración de los recursos con los que cuenta. Para ello, es conveniente realizar actividades que permitan obtener información precisa sobre los resultados educativos, por ejemplo: número de alumnos que concluyen sus estudios en el nivel correspondiente, índice de reprobación por grado, habilidades y competencias desarrolladas, etc. Además, es necesario prever las condiciones reales que el plantel tiene en cuanto a recursos humanos, materiales y tiempo.
Una vez que se cuenta con una visión precisa de los problemas, es conveniente analizar los datos obtenidos, con el fin de determinar qué problemas son, por su gravedad, los que deben atenderse primero.
La elaboración de un nuevo proyecto escolar se inicia con la definición de sus objetivos, que deben ser coherentes con el o los problemas elegidos por el equipo decente. Su planteamiento orienta las actividades y define hasta donde se quiere llegar en la solución del problema; es decir, aluden los resultados que se esperan alcanzar y, en consecuencia, da pautas sobre la forma de lograrlos. Un proyecto escolar puede plantear uno o varios objetivos.
Los objetivos deben ser definidos por todos los maestros de a escuela, con la intención de que realmente expresen lo que se pretende lograr como grupo; su planteamiento debe tener un sentido de utilidad tanto para los directivos, como para todos los docentes y alumnos, es decir, para todos los grados y grupos; no es posible plantear objetivos que solo atañan a los maestros o a los alumnos de “X” grado.
En tanto se definen co el propósito de orientar la búsqueda de soluciones para uno o más de los problemas relacionados con los resultados educativos de los alumnos, deben estar directamente vinculados con los propósitos establecidos en el plan y los programas de estudio de “X” currícula.
Los objetivos deben ser claros, precisos y realizables en un corto o mediano plazo; además deben ser congruentes entre sí, es decir, no cabe plantear propósitos contradictorios. Pretender objetivos demasiado ambiciosos, sobre todo al iniciar este tipo de trabajo, puede provocar frustración en el equipo docente si no se logra todo lo que se pretende. Por ejemplo, si se propone un objetivo como el siguiente:
“Que en el curso del año escolar el educando reciba los conocimientos y habilidades para aprender de manera autónoma a descubrir y asumir valores, analizar y resolver problemas, vivir en sociedad, aportar lo necesario para mejorar sus condiciones de vida y contribuir eficazmente al desarrollo de su comunidad”
Es probable que este objetivo no pueda realizarse en un ciclo escolar, ya que condensa buena parte de los propósitos educativos de toda una vida escolar –aunque es indispensable considerar estos propósitos educativos como marco, no se trata de reproducirlos en los objetivos de un proyecto escolar-. Por otra parte, este objetivo hace referencia a varias áreas del aprendizaje; evidentemente, no se deriva del análisis sobre los resultados educativos de los alumnos.
El extremo contrario es plantear objetivos que reduzcan los propósitos de la primaria a aspectos mínimos del aprendizaje o incluso que no los consideran. Por ejemplo:
“Que haya disciplina en la portación del uniforme escolar”
“Mejorar la ortografía de los alumnos de primer semestre”
Si bien estos tienen que ver en la formación de valores cívicos y con la habilidad para escribir, toca sólo aspectos mínimos de las asignaturas; para lograrlos no es necesario elaborar y desarrollar un proyecto escolar.
En cambio, cuando efectivamente se toma en cuenta la problemática específica de cada plantel, puede lograrse mayor precisión. Por ejemplo:
Proponer técnicas de trabajo en el aula que faciliten en los alumnos el desarrollo de:
a) La capacidad de expresar por escrito y oralmente ideas, pensamientos, conocimientos científicos, propuestas, preguntas, críticas, argumentos, sentimientos, etc.
b) El gusto por la lectura y la literatura.
c) La habilidad para realizar investigaciones sobre diversos temas y presentar los resultados públicamente.
Aunque parezca que este objetivo es demasiado sencillo, en realidad se refiere a los propósitos fundamentales de la educación y las estrategias y actividades necesarias para lograr lo exige le trabajo conjunto de todos los miembros de una institución
RÚBRICA DEL PROYECTO
SE VAN A EVALUAR LOS SIGUIENTES CRITERIOS.
FORMATO DEL DOCUMENTO.
REQUERIMIENTOS DE UN DOCUMENTO ACADÉMICO.
CITAS Y REFERENCIAS DE ACUERDO A A. P. A.
DELIMITACIÓN DEL PROYECTO.
INTRODUCCIÓN.
JUSTIFICACIÓN.
ÍNDICE.
SEGMENTO TEÓRICO, MARCO TEÓRICO Y MARCO REFERENCIAL.
LAS ACTIVIDADES, SU APLICACIÓN Y ADAPTABILIDAD.
PROPUESTA INNOVADORA.
SUSTENTACIÓN EN UNA METODOLOGÍA.
VENTAJAS Y DESVENTAJAS.
CRONOGRAMA Y SU CUMPLIMIENTO.
RECURSOS.
CONCLUSIONES.
ANEXOS: FOTOGRAFÍAS, MATERIAL DE COMPROBACIÓN, INSTRUMENTOS Y GRÁFICAS.
FORMATO DEL DOCUMENTO.
REQUERIMIENTOS DE UN DOCUMENTO ACADÉMICO.
CITAS Y REFERENCIAS DE ACUERDO A A. P. A.
DELIMITACIÓN DEL PROYECTO.
INTRODUCCIÓN.
JUSTIFICACIÓN.
ÍNDICE.
SEGMENTO TEÓRICO, MARCO TEÓRICO Y MARCO REFERENCIAL.
LAS ACTIVIDADES, SU APLICACIÓN Y ADAPTABILIDAD.
PROPUESTA INNOVADORA.
SUSTENTACIÓN EN UNA METODOLOGÍA.
VENTAJAS Y DESVENTAJAS.
CRONOGRAMA Y SU CUMPLIMIENTO.
RECURSOS.
CONCLUSIONES.
ANEXOS: FOTOGRAFÍAS, MATERIAL DE COMPROBACIÓN, INSTRUMENTOS Y GRÁFICAS.
PROGRAMA DE LA ASIGNATURA
Objetivo General: Elaborar una propuesta didáctica innovadora que ayude a la optimización del proceso enseñanza-aprendizaje E-A.
Nota: Aplicará la propuesta didáctica para evaluar los resultados y el impacto en el proceso E-A.
CONTENIDOS
1. Justificación teórica de la propuesta didáctica.
1.1. Justificación del proyecto.
1.1.1. Marco histórico.
1.1.2. Bases teóricas .
1.1.3. Aplicaciones.
1.1.4.Características relevantes.
1.1.5. Ventajas y desventajas.
2. Diseño, desarrollo y evaluación del proyecto didáctico.
2.1. Diseño del programa guía.
2.2. Desarrollo del proyecto didáctico.
2.3. Evaluación del proyecto.
2.3.1. Evaluación de los estudiantes.
2.3.2. Evaluación del profesor encargado del curso.
2.3.3. Autoevaluación.
Nota: Aplicará la propuesta didáctica para evaluar los resultados y el impacto en el proceso E-A.
CONTENIDOS
1. Justificación teórica de la propuesta didáctica.
1.1. Justificación del proyecto.
1.1.1. Marco histórico.
1.1.2. Bases teóricas .
1.1.3. Aplicaciones.
1.1.4.Características relevantes.
1.1.5. Ventajas y desventajas.
2. Diseño, desarrollo y evaluación del proyecto didáctico.
2.1. Diseño del programa guía.
2.2. Desarrollo del proyecto didáctico.
2.3. Evaluación del proyecto.
2.3.1. Evaluación de los estudiantes.
2.3.2. Evaluación del profesor encargado del curso.
2.3.3. Autoevaluación.
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